POR: JOSÉ PERNALETE/ DLA
Fuente: Diario Las Américas
Hugo "El Pollo" Carvajal, arrestado en
Aruba por agentes de EEUU, ha sido acusado de ser el enlace de Caracas
con las FARC para las operaciones de narcotráfico
Desde hace más de un año un equipo especial de investigadores de
distintas agencias norteamericanas, entre ellas la DEA, estaba tras los
pasos de Hugo “El Pollo” Carvajal. (El Nacional)
Las autoridades de Aruba detuvieron el miércoles, a petición de Estados
Unidos, al general venezolano en retiro Hugo Armando Carvajal Barrios,
quien fue jefe de la Dirección de General de Contrainteligencia Militar
de Venezuela (DGIM).
El militar realizaba frecuentes visitas a la isla en vuelos privados y
había sido presentado ante el Gobierno de Holanda como cónsul general
por parte de la Cancillería venezolana. Holanda nunca respondió al
pedido aparentemente por los vínculos del exmilitar con el narcotráfico y
a la guerrilla de las FARC.
De acuerdo con una fuente en Venezuela, desde hace más de un año un
equipo especial de investigadores de distintas agencias norteamericanas,
entre ellas la DEA, estaba tras los pasos de Hugo “El Pollo” Carvajal.
Aparentemente, los agentes fueron notificados sobre el arribo del
militar y procedieron a informar a las autoridades de inmigración de la
isla.
Se ha conocido que en 2011 y 2013, investigadores de la DEA
establecieron contacto con Carvajal para lograr su cooperación a fin de
desmantelar la poderosa red de narcotráfico cuya base de operaciones de
distribución se encuentra en la zona fronteriza entre Venezuela y
Colombia. Sin embargo, quien fuera “el hombre fuerte de la inteligencia
militar” durante el gobierno de Chávez, rechazó la oferta. La
investigación iba dirigida a revelar los lazos entre militares de alto
rango de Venezuela y líderes guerrilleros colombianos.
También ha trascendido el temor de algunos empresarios venezolanos
radicados en Florida tras la detención del militar en situación. “Más de
un testaferro chavista está temblando porque Carvajal los puede
delatar”, comentó una fuente, al referirse a supuestos inversionistas
que escondidos tras la fachada de hombres de negocios, laven fondos
procedentes del narcotráfico.
En 2008, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos dio a conocer la
lista de Traficantes de Narcóticos, conocida como "lista Clinton". En
esa oportunidad Carvajal fue señalado como facilitador del tráfico de
drogas procedente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
(FARC). Además, fue acusado de ser proveedor de armas, municiones,
credenciales oficiales y documentos de identidad de organismos
venezolanos a miembros de la guerrilla, a fin de facilitar su
desplazamiento en la nación sudamericana.
Otros dos militares venezolanos integraron esa lista: el exministro de
Interior y Justicia Ramón Rodríguez Chacín y Henry de Jesús Rangel
Silva, quien era para ese entonces director de los Servicios de
Prevención e Inteligencia (DISIP), ahora convertido en Servicio
Bolivariano de Inteligencia (SEBIN).
Uno de los documentos que más pruebas arroja sobre los vínculos entre
Carvajal y guerrilleros colombianos es la publicación de Los documentos
de las FARC, un compendio producto del trabajo de expertos forenses tras
el hallazgo de y análisis de información digital de Luis Edgar Devia
Silva, alias Raúl Reyes, uno de los más altos jefes de las FARC, quien
fue abatido durante una operación del Ejército colombiano. Esta
información fue incautada por las fuerzas armadas de Colombia tras la
incursión militar en marzo de 2008 en territorio ecuatoriano.
En uno de los correos que envió el llamado "canciller de las FARC",
Rodrigo Granda Escobar, a “Raúl Reyes” en junio de 2008, el guerrillero
aseguró que Carvajal en ese momento aspiraba a dirigir las relaciones
con FARC pero “se veía desplazado”. El informe reveló que el general
ahora detenido mantenía contactos con el embajador cubano en ese
momento, Germán Sánchez, quien le había advertido a su vez al presidente
Hugo Chávez sobre el peligro de que la información se filtrara.
En estas referencias, Granda expresaba el nexo que había entre la
inteligencia cubana y las operaciones de Carvajal. Además, otras fuentes
informaron sobre la participación del militar en operaciones de
secuestro y extorsión. “Este hombre estuvo frente al caso Boulton, una
vez salido Rodríguez Chacín”, según un informe fechado el 3 de junio de
2004, en relación con el secuestro del empresario Richard Boulton, quien
permaneció dos años cautivo. Supuestamente, fue puesto en libertad tras
el pago de cuatro millones de dólares.
En otro correo de Granda Escobar, de fecha 7 de julio de 2004, se
confirma la presencia del guerrillero en Caracas, con el apoyo de
Carvajal, quien proporcionó los documentos de identidad, además de
helicópteros y otros vehículos para el traslado en territorio
venezolano. El general se reunió con el guerrillero colombiano en su
despacho oficial de la DGIM con el fin de “estrechar los lazos de la
hermandad bolivariana”.
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